Rugido Austral
ALBUM REVIEW:
NAILS: EVERY BRIDGE BURNING
30 de agosto 2024
Por: Claudio
No pudo haber sido más adecuado el título del nuevo álbum de NAILS. No es solamente el regreso a las canchas, sino una declaración de principios ante la incertidumbre que rodeó a la banda tras el lanzamiento de “You Will Never Be One Of Us” (2016). Un éxodo masivo que dejó a Todd Jones como el único sobreviviente, incluso debiendo él mismo desmentir los rumores sobre el supuesto final del proyecto. Ocho años después, y resurgiendo de un ostracismo que nos dejó con dudas sobre el futuro, Jones encabeza el retorno de esta agrupación referencial de la música extrema de la década anterior, rearmando el grupo y ensamblando las piezas en su lugar para refregarnos en la cara una nueva descarga de frustración y rabia hasta la médula ósea.
La supervisión a cargo del renombrado productor Kurt Ballou, la mente maestra de Converge, es coherente con el lazo que lo une a NAILS desde el LP debut “Unsilent Death” (2010). Un productor de los que hacen sonar los discos con personalidad, el trabajo de Ballou es capturar el estado de gracia de una agrupación que, en este caso, renueva sus piezas en favor de un nuevo ciclo. Es ahí donde “Every Bridge Burning”, tanto por sus singles promocionales como el cuerpo del disco, no solamente deja ¿tranquilos? a los fans expectantes, sino que incluso nos presenta algunos ligeros rasgos integrados a ADN de violencia sónica de NAILS. Es cosa de aprenderse de memoria la alineación que acompaña a Todd Jones en este regreso a patadas: el guitarrista Shelby Lermo, el bajista Andrew Solis y, en especial, el baterista Carlos Cruz de los thrashers Warbringer. Lo de Cruz es destacable porque fue el primero en unirse al nuevo plan de ataque comandado por Jones, y eso explica en gran parte algunos rasgos que hacen de este cuarto LP de Nails un trabajo acorde a su catálogo anterior y, al mismo tiempo, sutilmente distinto.