Rugido Austral
ALBUM REVIEW: GORJEO SEGLAR ´ACRONVS´
el impio ariete que sofoca la vida
ESCRITO POR MARIO GONZÁLEZ ROJAS
Se quiebra el sereno con sones provenientes directamente desde la oscuridad más profunda, esa misma que asesinó la luz para entregarle una nueva forma, una oscuridad que martiriza desde el primer momento, la vida extingue, asesina, carcomiendo entrañas de seres cobardes y de aquellos que aún se aferran a la voluntad como becerros.
Acronvs nos va introduciendo a un mundo que ya no existe, que solo a través de la música y la oratoria se hace presente como el acto sin tiempo, el impío ariete que sofoca la vida sin misericordia alguna, carcome el sentido de aquellos débiles de mente que no saben reconocer el poder que se fragua en los rincones más oscuros de la muerte.
Ráfagas de viento y lluvia golpean nuestros rostros, transformando el camino en un andar sigiloso, pero lleno de emociones, que evocan momentos pasados, llenos de melancolía pétrea, en donde la serenidad que algunos expelen se quiebra desde la primera bocana que llameante lacera sin misericordia alguna.
El paso a la furia destemplada con que Gorjeo Seglar nos bombardea, llena de oscuridad la explanada que se hace presente con cada riff que carcome el alma de los beatos que cobardes ven como se les destrozan los oídos al escuchar tanta verdad destemplada.

Así se nos manifiesta ese canto que va quebrando a millones, volviendo imperfecto al tiempo, impío de pensamientos, recae sobre lo inocuo para destruirlo a los segundos, es imperecedero ya que rompe con lo establecido, aquellos dogmas creados por la misma casta de malnacidos.
Momentos llenos de cólera desmedida, que tan bien nos transmite desde su propia esencia, con el machacar constante, de vocales fúnebres, ritos paganos con líricas colmadas por el conjuro, que se hace presente en un cruce de caminos en donde el mundo que apenas habías conocido ahora solo es tierra y polvo.
Desde los mundos oníricos, irreales y funestos se va abriendo paso en las noches de sereno, como un espectro va inundando los caminos, desfalleciendo a mortales y espíritus. Gorjeo Seglar nos introduce aún más en la lobreguez eterna, en donde lo material no gobierna y el raciocinio queda ínfimo para poder entender tanta vastedad eterna.

Siete himnos de oscuras trovas erigidas en un fuego ígneo y adyacente muerte van forjando este cruento trabajo que se erige para destruir al cobarde que no sea capaz de escuchar sus alegorías que hablan de destrucción, muerte y devastación, el sulfuroso inquebrantable rige los designios y como en un mantra lacerante nos envuelve por aquella vastedad que se vuelve pétrea, opresiva y funesta.
Guturales impíos nos revelan los designios, como una bruma profana va rigiendo los cantos que llevan muerte a los campos, en donde los restos sin vida son la constante y llenos de oscuros lamentos, nos sumergimos en el tiempo del eterno. La exterminación de la civilización se vuelve incontrolable ante la devastación total, porque polvo somos y en polvo nos convertiremos como aún trinan algunos pájaros que se quedaron atados a un pasado que se quema sin piedad y llenos de miseria.
Ya que nuestro legado será un mundo caótico qué se va consolidando día a día, es cosa de que te saques la venda que cubre tus sangrantes ojos y veas por ti mismo la mierda que se levanta alrededor de tu rostro. Es la depuración del germen en una auto aniquilación que sin darse cuenta esta raza maldita la desestima, por ego, por muerte, por el vaivén de los hechos, por vicisitudes en consecuencia de una superficialidad engendrada por el mismo vulgo.
Apocalipsis natural en donde la madre tierra vuelve a tomar las riendas, pasando nuevamente la cuenta a ese bastardo ser que es miope hasta el desfallecer, naturaleza indómita que en estado salvaje es el ente más letal y a la vez creador vas destruyendo al minúsculo ser, lo tomas por asalto, devastado todo a tu paso.